Este año no podremos comprar las tradicionales rosquillas que se venden en el barrio de San Blas, ya que debido a la situación derivada por el Covid-19 no se celebrarán fiestas el día del santo. Por ello, en este artículo os proponemos una sencilla receta para cocinar las rosquillas de San Blas, con ingredientes que podéis comprar en el Mercado de Tolosa, con la que podréis disfrutar de la costumbre en casa.

 

Monte uzturre con nieve desde izaskun

 

Existe un dicho que dice que “San Blas cura la garganta al joven que come y no canta.”, y es que suele relacionarse al santo con la salud de la garganta.

Ya en nuestro pueblo, como la costumbre marcaba salir a cantar la víspera de Santa Águeda, eran muchos los que, por evitar los males de garganta, llevaban rosquillas, pasteles y tortas a bendecir a la ermita de San Blas.

Esta costumbre dio paso a las tradicionales rosquillas de San Blas, que pasaron a venderse ya bendecidas. Este año no será posible comprarlas allí, y hoy traemos una sencilla receta para poder hacerlas en casa.

 

subida al monte uzturre con nieve desde Tolosa

¿Cómo se hacen las rosquillas de San Blas?

 

Ingredientes (25 rosquillas):

 

-500 gr. de harina

-2 cucharadas soperas de azúcar

-7 huevos

-120 ml. de aceite de oliva

-2 cucharadas soperas de anís

 

Para la cobertura:

-400 gr. de azúcar glass

-4 claras de huevo

-Un chorrito de anís

 

Elaboración:

      1) Mezclar los huevos, el anís, el azúcar y el aceite, y añadir la harina poco a poco. Amasar bien hasta que quede una masa homogénea.

      2) En una bandeja cubierta con papel de horno, hacer porciones con la masa y extenderlas en forma de rosquilla, untándolas con un poco de aceite para que no se peguen.

      3) Precalentar el horno a 160º y cuando esté caliente, hornear las rosquillas durante 20-25 minutos. Cuando ya estén listas, dejarlas enfriar hasta que queden duras (Es importante enfriarlas antes de ponerles la cobertura, ya que sino se estropea).

      4) Para hacer la cobertura, batir las claras de huevo añadiendo poco a poco el azúcar glass y el anís, hasta formar un merengue denso.

      5) Cubrir las rosquillas con el merengue y dejarlas secar hasta que quede duro.

Y listo! Ya tendremos nuestras rosquillas de San Blas, ¡Listas para comer!